Esta impresionante escultura fue realizada en 1904 por Enrique Clarasó. Su título: Dejando la tierra. En palabras del autor: “Se trata de una representación plástica del vuelo del alma que, representada por una vaporosa y mística figura de mujer, deja el lodazal de la tierra para elevarse a las serenas regiones del infinito”.
También en 1904, Clarasó realizó esta hermosa estatua donde un hombre alza un pico (hoy falta) cavando la fosa. Su título: Memento homo... ("Recuerda hombre que polvo eres y en polvo te convertirás"). Decía el autor: “La figura o estatua representa el compendio de la vida humana: honores, riquezas, orgullo, todo se reduce a lo mismo, polvo".
Sorprende encontrar en el cementerio un desnudo tan explícito. La figura transmite serenidad y sostiene una careta en una alegoría del examen de conciencia. Se debe al escultor Miguel Cabré en 1978.
Esta delicada pareja de ángeles tiene armonía y belleza, lejos del patetismo de otras esculturas funerarias.
Ciertamente, unas esculturas preciosas, que no denotan para nada ese mismo aire de las que son funerarias... la de los angeles y la mujer, me han encantado...
ResponderEliminarUn saludo!
Mar.
El pico falta porque la familia de la tumba lo retira y lo coloca para todos los santos. Se trata de no dejar material utilizable para saquear tumbas tan accesible.
ResponderEliminarLa del desnudo es muy curiosa, pues es el único en todo el cementerio.
He descubierto tu blog mientras buscaba esculturas funerarias y me ha sorprendido la que publicaste, por su inusual forma. Curiosa he entrado en tu página y realmente he encontrado fotografías fantásticas por su belleza plástica y porque recogen momentos de la vida cotidiana que me han recordado viejos tiempos. Cuanto más leía, más me enganchaba... ¿Será la "droga" de La Ferretera Aragonesa".
ResponderEliminarGracias por hacer más amenas mis noches de insomnio. Seguiré tus pasos para conocer mejor tu ciudad.
Me alegra saberlo. Gracias.
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