La otra gran obra emblemática de la Expo 2008 es la Torre del Agua. Al igual que el Pabellón Puente, es una edificación bastante hermosa para muchos, que no deja indiferente casi a ninguno. Su planta tiene la forma de una gota de agua. Pero, también en este caso, pasado el asombro inicial, surge la gran pregunta: ¿para qué sirve una rascacielos hueco? Durante la Expo, sirvió para colgar una impactante (al pie de la letra) escultura titulada Splash de 21 m de altura y formada por 135 piezas que, en general, gustó al público. También sirvió para subir a la terraza, donde disfrutar de muy buenas vistas. Pero ¿solo para eso se construye una millonaria torre de 76 m?
Si no hubiera explotado la crisis bajo nuestros acomodados traseros, tal vez fuéramos más complacientes con estos caprichos, argumentando el valor de lo bello aunque inútil. Pero con todo lo que después ha venido...
Si no hubiera explotado la crisis bajo nuestros acomodados traseros, tal vez fuéramos más complacientes con estos caprichos, argumentando el valor de lo bello aunque inútil. Pero con todo lo que después ha venido...
Terminada la Expo se cerró la torre e incomprensiblemente, lo único que contenía, el Splash, fue desmontado. Recientemente ha vuelto a ser montado (casi medio millón de euros han costado ambas operaciones) y en los próximos días podrá ser visitado de nuevo. Pasito p'alante, pasito p'atrás.
Vaya despilfarro de dinero sin sentido. Ya podrían haber dejado donde estaba la gotita del agua. Por cierto, que la Torre del agua merece alguna utilidad urgentemente. Saludos!
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