La velocidad, la ingravidez, la fugacidad del momeno potenciada por las leyes físicas... son, entre otros, los elementos de la realidad que fascinaron a Jacques Henri Lartigue (1894 - 1986) para crear su universo fotográfico, ya desde los 8 años.
Desde una posición acomodada, fue testigo feliz en la primera mitad del siglo XX de sus inventos y nuevas costumbres, sin otro afán que hacer perdurable el instante en la imagen: los deportes de la gente guapa, la elegancia de las damas con sombrero y sombrilla o los juegos de los niños burgueses como él mismo. El siglo XX no fue sólo esto, pero también esto.
Podemos disfrutar de su obra en la exposición "Un mundo flotante", en la Lonja (del 30 de junio al 31 de agosto; martes a sábados, de 10 a 14 h y de 17 a 21 h; domingos y festivos, de 10 a 14 h). Muy recomendable.
Fotos: de J. Henri Lartigue, obtenidas en la red.
Muchas gracias José María por la información. Acudiremos a verla.
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