viernes, 20 de febrero de 2015

Garum

Estas ánforas romanas contenían uno de los manjares más apreciados en el Imperio Romano.
Ánforas. Forma Dressel 12 (s. I d.C.). Encontradas en la Colonia Cesaraugusta (Plaza de las Tenerías). Museo de Zaragoza.
Según se leía en letreros sobre estas ánforas, contenían garum scomber (garum de caballa). El garum era una salsa de vísceras de pescado fermentadas con sal y maceradas con hierbas aromáticas, un ingrediente indispensable en las mejores mesas romanas. A pesar de que su descripción puede resultarnos hoy vomitiva, se le consideraba algo exquisito, reservado a la gente rica, y se le otorgaban efectos afrodisíacos. Según relata el historiador Plinio, esta salsa de pescado podrido llegó a ser más cara que el mejor perfume ("más caro que el garum" se dice aún hoy en Murcia, para ensalzar el valor de algo).
Las principales factorías productoras estaban en el sur de Hispania, especialmente en Cádiz (era muy afamado el garum bético) y en Almuñécar (Granada), siendo embarcado en el puerto de Carthago Nova (Cartagena) hacia el resto del imperio, llegando a ser una de las principales fuentes de riqueza en la Hispania romana. También fue objeto de comercio a través de los barcos que recorrían el Ebro.
Gracias al análisis del garum encontrado en estado sólido en ánforas de Pompeya, algunos investigadores lo han conseguido elaborar en nuestros días.
De él decía Marcial: “Recibe esta salsa preciosa, regalo que debes tener en mucho aprecio, pues se trata de la primera sangre de la caballa que está expirando”. Pero su fuerte sabor ácido no parece del gusto actual. Los gustos cambian.

1 comentario:

  1. Que curioso,desde Cádiz lo exportaban hasta Italia y más lejos;desde luego
    debería de contener muchos conservantes naturales,y les resultaría tan rico.
    Sonia

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